El ejercicio regular y una dieta equilibrada pueden reportar numerosas ventajas, como un aumento de la energía, la diversión, la salud e incluso una vida más larga. La salud general de una persona viene determinada sobre todo por su alimentación y su nivel de ejercicio, por lo que incorporar ambos a su estilo de vida puede tener un impacto significativo en cómo se siente y en su aspecto.
Beneficios para la salud
Frutas, verduras, cereales integrales, productos lácteos bajos en grasa y carnes magras deben formar parte de una dieta equilibrada. Debe consumir una dieta sana y limitar la ingesta de grasas saturadas, colesterol, sodio y azúcar. Una buena dieta ayuda a reducir el riesgo de cardiopatías, osteoporosis, diabetes de tipo 2, hipertensión arterial y ciertos tumores malignos, además del ejercicio regular.
Peso
Comer bien y hacer ejercicio con frecuencia puede ayudar a las personas con sobrepeso a perder peso de forma segura y a mantenerlo. El ejercicio y una dieta equilibrada pueden ayudarle a mantener su peso actual y reducir las probabilidades de volver a ganarlo con la edad, aunque no tenga problemas de peso. En comparación con otros alimentos, los alimentos nutritivos suelen tener más nutrientes y menos calorías. El ejercicio frecuente ayuda a quemar el exceso de calorías necesario para mantener un cuerpo sano.
Energía
Puede sentirse con más energía y más consciente de lo que le rodea, tanto física como intelectualmente, combinando una buena dieta con ejercicio regular. Una dieta sana aporta al organismo las vitaminas y nutrientes que necesita para funcionar a pleno rendimiento.
Ánimo
El ejercicio regular mejora el estado de ánimo porque activa sustancias químicas cerebrales que contribuyen a la sensación de satisfacción, disfrute y relajación. El ejercicio también puede mejorar su aspecto físico, ya que tonifica los músculos y quema grasa, dos factores importantes para mejorar su autoestima y sentirse realizado en la vida.
Diversificación